Jorge Alberto Elías – Militante de la Abogacía
Desde la Sección Paraná lamentamos el fallecimiento del Dr. Jorge Alberto Elías, recordamos y celebramos su vida a través de estas líneas escritas por el Dr. Orlando Alberto Jorge, para nuestro colega, quien se matriculo en 1973 y fue Tesorero en el periodo 1984/1986 y Tesorero en 1988/1990 de nuestra sección.
Quiero evocar hoy al querido colega y amigo como lo que realmente fue, un verdadero militante de la Abogacía.
Tuve el honor de compartir con él, junto con otros profesionales, la integración del Consejo Directivo del Colegio de Abogados de Entre Ríos en los períodos 2007-2009 y 2009-2011, durante los cuales asumimos la responsabilidad de conducir los destinos de la Institución.
En esa cercanía diaria, tratando de encontrar una mejor solución a los problemas que siempre aquejaron y aquejan a la abogacía, pude apreciar acabadamente la pasión que guiaba sus actos en defensa de la profesión.
Y eso que yo llamo pasión, lo demostraba con hechos al tratar a las y/o los colegas sin distinción, siempre con una palabra amable y una sonrisa en sus labios o el consabido chiste si se prestaba la ocasión. También con el mensaje que transmitía a quienes se iniciaban en la profesión, donde les resaltaba que en la práctica de la misma se puede ir por el camino o por el atajo, siendo el primero más largo pero honorable y el segundo más corto, pero dejando jirones de ética, moral y honor. Su militancia fue siempre enaltecer la Abogacía, mejorar la formación del abogado, para lo cual propuso en algunos casos la creación de Institutos de Derecho y en otros apoyando los ya existentes para mejorar su funcionamiento.
Su desempeño en el Consejo Directivo fue ejemplar. Siempre dispuesto y dedicado plenamente a la responsabilidad que le habían delegado los colegiados; atendiendo a todos y cada uno de los Consejeros con las inquietudes y necesidades de las distintas jurisdicciones de la provincia.
A nada estaba ajeno, ponía todo su empeño en lo que hacía para favorecer el respeto por la profesión y la vigencia plena del derecho en nuestra sociedad; actitud que ejerció no sólo cuando detentó la responsabilidad de integrar la conducción del Colegio de Abogados, sino que también lo supo demostrar siendo un colegiado más.
Creo firmemente que en el ejercicio profesional supo amalgamar el trato con sus defendidos, sus colegas y el estudio del derecho, lo cual no resulta sencillo si advertimos que nuestra misión como abogados no sólo es respetar y hacer respetar nuestra Constitución y las leyes, sino fundamentalmente actuar decididamente para obtener una sociedad que sepa valorar la convivencia y el respeto por el otro.
Y es esto en definitiva lo que persigue el derecho y Jorge Elías lo entendía y practicaba.
Nuestro querido colega, nos deja su gran ejemplo, porque sin lugar a dudas, cumplió con creces lo que en su momento propuso el jurista italiano Piero Calamandrei: «La abogacía es una profesión que debería ser considerada noble y eterna como la idea de Justicia